FARMACIA DE GUARDIA.

 

NIÑEZ.

En 1974 nací en la Maternal del Hospital Valle de Hebrón de Barcelona, que en aquella época se llamaba Residencia Francisco Franco.

La unidad de partos, en aquel entonces estaba regida por monjas. 

A los 3 meses de vida me pusieron la vacuna etrivalente y me provoco unas reacciones adversas muy fuertes hasta dejándome paralizados mis pequeños y frágiles riñones.  

Los médicos empezaron ha tratarme con corticoides para ayudar a la función renal. Que después, más tarde a los 10 meses de vida me hicieron una biopsis en el Hospital San Juan de Dios de Barcelona. 

Aquellas vacunas las trajeron de fuera, y no estaban en condiciones, para ser administradas a los niños.  

Aquí con mi madre en su regazo las dos sonrientes. Ella era feliz si me veía sonreír, pues también sonreía mi querida madre. Era feliz cuando sentía mi cuerpecito a su lado. Me tenia bien abrigada para no resfriarme y  protegida entre sus brazos, con ese  calor de madre con su pequeña.

Parece justo, todo correcto, y normal, pero no lo fue en la realidad para nada. Fue injusto todo el dolor que nos toco vivir. Mis padres en aquellos años eran jóvenes y sin experiencias de todo lo sucedía. Cuando vieron que la vacuna había rotó todos los estribos de mi vida por completo. Fue lo más fuerte que vivieron por mí. 

Los momentos más felices de mis de ellos, eran cuando me tenían conmigo en casa. Los médicos siempre me tenían ingresada por alguna causa y fue un sin vivir para ellos y para mi.

Esta fotografía nuestro aquí la tenía bien guardada por que dice lo mucho de lo que me querían los míos y siguen queriéndome sin duda. Era un inmenso amor que sentían por tenerme y traerme a la vida. Lo más normal de unos padres que se les cae la baba por sus criaturas, donde se pasan todos los días, sufriendo y otros días llorando, por tener una puerta abierta hacia una esperanza para sobrevivir.

Se, ha ciencia cierta, que mis padres no pudieron disfrutar todo cuanto pudieron, de mi niñez cuando ya te están haciendo un diagnostico y pasas más tiempo ingresada en el Hospital, que en casa con los míos. Con tan corta edad, es muy duro para cualquiera de ellos dos. Mayormente para una madre con su instinto materno y no poder coger en brazos a su hija todas las veces que mi madre deseara o quisiera yo era su niña, su pequeña y era una locura tener una hija que la tuvieran tanto tiempo ingresada. Peor que ver una película de ciencia ficción. ( Que todo es mentira ). Esto es el gran remordimiento que me queda de este mundo del que vivimos todos y del cual es incierto lo que nos muestra la sociedad terrestral.

Hoy día hay muchos adelantos y todo lo que sea, pero las familias rotas lo llevan por dentro bien apuntado en la agenda.

Des de entonces, me pregunto ¿ he aprendido algo ?, por supuestos que sí, he aprendido muchísimo. Y mis padres también. Pero yo lo suficiente como para hacer ganas de ver una vida moderna sí todo es tan oscuro. Me toco esta cruz, pero hoy día estamos en el s. XXI y ahora la sociedad entera esta viviendo algo que también es  duro de llevarlo... No se están tomando las cosas en serio y para mí, esto cuando no se hace lo que se debe de hacer, será como sí actuarán al estilo suicida, vamos que es como si les diera lo mismo perder la vida.

Es extraño… muy raro, como si fuera unas muertes silenciosas y la gran impotencia que queda en el cuerpo, tiene que ser inolvidable.

-       Que injusto… ¿ no ?. He vivido mi gran batalla, mi lucha y sigo luchando por seguir viviendo, pero veo que muchas cosas de las que suceden ahora, se pueden evitar. 

Yo, siempre digo que aun quedan por llegar mejores tiempos, donde conoceremos y valoraremos mucho más, el aprecio, el cariño dejando de lado todos aquellos personajes que no tuvieron jamás una muestra de afecto o humanidad. Esos mismos personajes, hay que dejarlos que fluyan solos y estar mucho más tiempo con los de casa. Por que los recuerdos más hermosos son los momentos que se viven con los padres. Esa es la mayor herencia, aquello que te enseñan con todo el corazón. La devoción con el ajeno, no es todo cierto.

                                                               M.Pin.@.  

            

Comentarios

  1. Me han asomado las lágrimas leyéndote. Que
    bien has contado tu experiencia y tu comprensión y la empatía de saber ponerte en el lugar de tus padres o de los padres y madres que hayan o esten pasando por situaciones como la vuestra. Pero aun asi, con todo lo negativo que hay en esos problemas, has sabido sacar lo mejor y, hoy por hoy, habeis llegado a una cierta normalidad de aceptación de la situación, y habeis logrado sobrevivir con mucho esfuerzo por parte de tod@s. Eres una mujer, una hija maravillosa y ell@s siempre han estado orgullos@s de tenerte y cuidarte y tu de su cariño y tesón
    Te felicito por eso. Es una grande experiencia de amor y lucha.
    Un besazo, Mónica.

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    1. Hola Bea.
      Eres un sol. Veo que has podido entender ese reflejo, en el que no se trata de un cuento de Hadas, sino de estar ahí constante ante un motivo que se necesitaba amor y atención plena. Claro que me se poner en el lugar de los demás cuando los padres sufren por un hijo.
      Un abrazo de buenas noches.

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  2. que joven y bella eres .Por tu escribir te daba mas años te felicto querida abrazos

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  3. Hola Mucha.
    Te agradezco tu visita. Soy del 74. Y creo que por tu comentario, no has leído nada de lo que he escrito en esta nueva entrada. Que pena. ¿ no ?
    Un abrazo de buenas noches

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  4. Hola Mónica, qué duro lo que nos cuentas. Cuanto se sacrifican aquellos que nos dan la vida, lo cierto es que lo entiendo muy bien. Mi hermano pequeño tiene una enfermedad de la que nada se sabía hace 44 años.
    Un beso muy fuerte. Me ha encantado tu entrada :D

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    1. Hola Margarita.
      Buenos días guapa.
      Es un reconocimiento de poder pensar y valorar aquello que en la realidad merece la pena luchar. Por la vida siempre... Nunca digamos nunca, por que ver el día de cada día, es esencial. Significa todo.
      Siento mucho contar esto tan duro, pues ahí es donde podemos ver, que no todo el campo florece. Hay cruces que acompañan toda la vida.
      Siento lo de tu hermano. Aunque desconozco su caso.
      Un abrazo enorme.

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  5. Una vacuna que pretendía protegerte se cruzó en tu vida en el momento que habría sido más feliz, pasó a ser un sufrimiento sostenido. Se puede comprender muy bien la dureza de tal experiencia y aunque no nos cuentas como acabaron las cosas, supongo que todo terminó bien y quedó atrás todos esos malos recuerdos. Confío en que estés bien y que tu vida se haya desarrollado dentro de los cauces normales. Si quieres contarme alguna cosa, mi correo es el siguiente:
    franziska34@gmail.com
    Un abrazo.

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  6. Hola Franzisca.

    Se agradece un montón tus palabras.
    Pues sí, pausadamente iré escribiendo
    más entradas sobre mi trayectoria de lucha.
    Un problema así. Pasa por lógica un problema crónico del cual hay personas que hablan por hablar sin entender nada. Yo me se poner en la piel de cualquier persona con un duro problema. Pero no puedo meterme en la vida de nadie.
    Los especialistas están para dar mejor calidad de vida y ayudarnos a seguir hacia adelante. Mientras estamos en una sociedad que fingen y no sienten nada. Y quizás estén deseando a una lo peor de la vida, pero nunca es como otros quieran seguir viéndote. Claro que mi vida cambio. Tengo mi propia pareja. Mis padres están siempre ahí. Por ellos y la medicina se puede sobrevivir.
    Un enorme abrazo, guapa

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  7. Que faena te hizo la vida con esa vacuna.La mayor de mis hijas nació en Zaragoza en 1971 y por supuesto le pusieron las vacunas pero gracias a Dios todo fué bien. Lo pasé mal con la otra de mis hijas que enfermó de meningitis y estuvo muy grave y yo con ella en el hospital día y noche hasta que se recuperó. Tú eres y fuiste fuerte y has salido adelante y eso tiene mucho mérito.Besicos

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  8. Hola Charo.
    Lamento lo que tu otra hija.
    Así es la realidad. Estar con un hijo día y noche en el hospital, eso es lo que vivieron mis padres conmigo. Y me siento como culpable por que los años pasaron con la esperanza de estar más con ellos y no pudo ser. Mi niñez, adolescencia y parte de mi juventud la vivi entre médicos. Diálisis, trasplsntes renales, pruevas... etc
    Y sigo luchando contra todo. No queda otra.
    Un abrazo y gracias por tu comprensión.

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  9. Hola querida Mónica, lamento mucho lo que haz vivido
    y el sufrimiento de los padres, cuando su propio hijo,
    tiene cualquier problema de salud, y aun sigues tu luchando, debe de ser muy triste, pero a veces que
    debemos estar también agradecidos con Dios que te permite seguir adelante, dándote fuerzas, hay mi amiga,
    cada hogar tiene su historia y no lo sabemos,cuidate
    mucho mi amiga, y sigue adelante no decaigas.

    Besitos dulces

    Siby

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  10. Hola Siby.
    Buenos días.
    La verdad que es un causa que necesita su lucha continua, pero no para decaerse,ni mucho menos. En este caso no hay tiempo para entristecerse. Simplemente seguir hacia adelante y haciendo lo que los médicos nos digan. Y sino me cuidara, ni me tomara las cosas en serio, no estaría escribiendo ahora aquí, por decirlo de alguna manera. Una insuficiencia renal necesita sus cuidados de por vida. Procurar no hacer el burro.
    Agradezco mucho tus palabras y por leerme. Pues veo que es importante leer antes de escribir y te aplaudo porque me has leído.
    Estoy muy agradecida.
    Una abrazo y feliz miércoles.

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  11. ¡Qué triste todo lo que has pasado, estimada Mónica! las vacunas a veces son muy peligrosas, incluidas las vacunas contra el covid19, que yo hace un mes me dejé colocar por los ruegos de mis hijos...(pues mi miedo era tanto que no quería que me vacunaran) ya que en las noticias me he enterado de muchas muertes por causa de estas vacunas experimentales. ¡Cuánto habrán sufrido tus padres viéndote hospitalizada gran parte de tu niñez! Y por desgracia esos efectos adversos dejan secuelas a veces. Amiga, tú aún eres muy joven, pues por el año de tu nacimiento he sacado mi cuenta...una de mis hijas nació en 1,979...(muy cercana a tu edad)...Cuídate mucho, aún tienes mucho por vivir. Un abrazo grande.

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  12. Querida Ingrid.
    Que reconocimiento más positivo me has dado. Alucina me dejas con tus palabras y el saber que los padres son merecedores de ser felices. Después de todo. Me considero una mujer que he salido de situaciones duras de salud. Por una insuficiencia renal también te acarrean otras con el paso de los años y una tiene que estar curada de espantos como se suele decir. Tu hija nació 5 años después y por suerte ya se habló más del tema de la vacuna etrivalente. Era para no coger las paperas, baricela, sarampión, tosferina...etc. En fin la que le ponen a los bebés cuando cumplen los 3 meses de vida.
    Pues mira ahora, como estamos toda ciudadanía.
    Seguimos con los casos del Covid19 y esto ya no hay quien lo entienda.
    Por eso yo sigo con la mascarilla pero si seguimos así, los que tenemos otros problemas de salud, podemos caer enfermos por insuficiencia respiratoria, problemas de corazón, asma. Y ya no sigo por que se ha liado la parda.
    Ahora resulta que con las vacunas también se pilla. No tan agresivo, pero la iniciativa tenía que haber sido para protegernos y creo que no estamos protegidos por que otros tienen el Covid dentro del cuerpo y no lo saben.
    El virus este, es un ser vivo que quiere ir mutando por todo el mundo entero haciendo la gravedad más extensa. Entonces si lo intentan atrapar el virus se defiende contagiando para que la gente siga falleciendo. Esto es muy duro.
    Yo hoy he tenido un día malo. De esos que por donde iba me sentía preocupada con sensación de estar muy enferma. Caminado por la calle con la mascarilla y ha más de 30°C pues me sentía fatal. Me faltaba aire y me marché a casa para liberarme del gran bochorno y calor que me daba la mascarilla.
    Un abrazo de buenas noches.

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  13. Hola Mónica me he conmovido con tu relato, que nos ayuda a detennos y valorar también es muy duro que llega al alma, tu reflexión es final s muy cierta sino se cuidan es pasará factura, los tiempos son los que son y hay que vivirlos con resignación, que forma tan huma de desnudar tus recuerdos, un abrazo fuerte desde mi brillo del mar

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  14. Hola Bea.
    La vida parece que para algunos es sólo una gran fiesta todos los días del año. Pero en la realidad quien tiene que luchar, luchará por la vida este como este, y en el estado de este. Y quien no luche por si mismo, más cruda verá la vida por el poco valor y esfuerzo que haya depositado.
    Me alegro mucho ver tu visita.
    Un abrazo.

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