FARMACIA DE GUARDIA.

ARRES DE SUS Y ARRES DE JOS.

Hola amigos. Ya estoy aquí con mi nuevo cuento. Espero que cuando tengáis un rato de tranquilidad y descanso al final del día. Os desconecteis de todo y disfrutéis unos minutos leyendo esta nueva história, por que se hacen con mucho empeño, con cariño, amor e ilusión y sobre todo que os guste lo que leía y saborearlo bien, claro está. 

No recomiendo que escribías cuando veías solamente las ilustraciones con UN PRÓXIMAMENTE. Eso significa que no habéis dado ni siquiera el valor del cuento con cuestas palabras y a la vez vivimos de forma rápida, deprisa y pasando como tal y darlo por cumplido. 

                        Felices sueños!! 

En el pueblo de Arres de Sus y Arres de Jos, ambas poblociones  antiguamente fue ubicada a la mineria. De la Mina Solitaria y la Mina Victoria, se extraia dos clases de minerales; el Zinc y el Plomo. Para los vecinos de Arres Sus y Jos. Fue una fuente de oportunidades de trabajo para el hombre, aunque era un trabajo muy sacrificado y peligroso, arriesgando. Donde se dice que se convirtió en " el pueblo de las viudas ". Eso es lo que cuenta la leyenda.

 

Al empezar la semana,  los niños ayudan a sus padres y abuelos en las tareas del campo. En Arres Sus vivía dos hermanos, Eire de 13 años y su hermano Pol de 11 años Unos niños muy buenos, sonrientes, cariñosos con la familia y encantadores con los vecinos de los dos poblados.

Cuando llegaba la primavera, el abuelo Ricardo solfateaba la cosecha. Mientras su hijo Trébol sacaba las patatas que ya estaban listas para recoger con la ayuda de sus dos hijos, Eire y Pol. 

Con la gran cantidad de patata que tenía la familia guardadas en el almacén era, para dar y tomar. Incluso en las ferias que se realizaban durante el año, Eire y Pol iban a vender patatas con su abuelo Ricardo. 

Rosa, la madre de los niños, hacia sus soculentos guisos con patatas cocidas: Estafado, fabáda Asturiana,  Ollas Aranesa, Pulpo a la Feria, Cocido Madrileño, Tortilla de patatas... y una variedad de platos buenísimos y sanos. 

Ellos eran los que vivían en Arres de Sus y en Arres de Jos vivía la señora Victoria con su hija Andrea de 9 años, hermana y sobrina de Rosa. 

Victoria, en plena primavera solía segar la hierva seca con la hoz. En aquellos tiempos ni existían máquinas de segar, ni tractores para recogerla. Eran trabajos de mano de obra. Con la hierva desgranando el grano de trigo y con el cocian el pan en un horno de leña que cabían 40 panes de pages.  Lo guardaban en el pequeño horreo para mantenerlo fresco y tapado. 

Andrea, la niña iba juntando grandes ramos de hierva seca que su madre Victoria le iba dando recién cortada a su hija. 

Y con trocitos de cuerda ataba la hieva haciendo montoncitos en el suelo al estilo de Cuevas de paja. 

Su prado de trigo ya habían salido flores . Al rededor del campo ya habían florecido amapolas rojas, margaritas margaritas blancas y hortensias azules.

Su hermana Rosa compraba el pan del que hacía Víctor, el marido de Victoria. 

                                                M.Pin.@.